Evangelización

 
 

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"Uno por uno"

Se habla de un americano que estuvo andando por una de las bellas playas de M�xico al anochecer.Mientras andaba, empez� ver desde lejos a un mexicano tambi�n andando. Solo que el mexicano andaba agach�ndose, recogiendo algo y luego tir�ndola nuevamente al mar. Una y otra vez sigui� haciendo el mexicano lo mismo.

Mientras que se acercaba el americano, vio que lo que estaba haciendo el mexicano era recoger las "estrellas del mar" que se hab�an quedado sobre la playa cuando se hab�a bajado la marea.

El americano se qued� bien desconcertado y confundido y le pregunta al mexicano �qu� era lo que andaba haciendo?.

El mexicano responde, "Estoy echando de nuevo al mar a estas estrellas del mar. Entiende que, si no regresan pronto al agua, se ahogar�n por falta de ox�geno."

"No entiendo", dice el americano. "Hay miles de estrellas del mar sobre la playa. Es imposible poder alcanzar a todos. Simplemente hay demasiados. �No entiendes que esta playa es solamente UNA de cientos de playas en M�xico? �No vez que es imposible la tarea? �No entiendes que, al final del d�a, lo que est�s haciendo no har� ninguna diferencia alguna?"

El mexicano se agacha de nuevo, recoge otra estrella del mar, lo tira al agua y le dice al americano, "�pues le hice una gran diferencia a esta!"

 

Evangelismo Real

Si vamos a ser efectivos al alcanzar a la gente para Cristo, vamos a tener que comenzar a ense�ar a la gente que realmente nos importa.  Evangelismo y misiones se deben de relacionar por naturaleza. No hay ning�n record de que Jes�s se haya acercado a alguien mirando el cielo y haya dicho: yo soy el Mes�as y despu�s empezar a mostrar su inter�s por ellos.

Hay una historia acerca de un hombre que iba en un lujoso velero y de repente se cae al mar. El no sabe nadar y en su desesperaci�n empieza a pedir ayuda. Ahora hab�a muchos salvavidas a bordo que hab�an presenciado el incidente. El primer hombre era un MORALISTA. Cuando �l vio al hombre caerse, �l inmediatamente tom� su portafolio y sac� un libro para ense�arle a nadar. �l entonces se acerc� al hombre y le grit�: Hermano, tu l�ete este libro, sigue las instrucciones y estar�s bien.

El hombre que estaba al lado era un IDEALISTA. Cuando �l vio al hombre caerse, �l inmediatamente salt� al agua y empez� a nadar alrededor del hombre que se estaba ahogando y le dijo: F�jate como nado. Nada como yo lo hago y vas a estar bien. La otra persona que estaba ah� era un miembro de la IGLESIA INSTITUCIONAL. �l mir� la s�plica del hombre ahog�ndose con mucha preocupaci�n. Entonces le grita: ahora, espera un poco amigo, la ayuda viene en camino. Vamos a establecer un comit� y vamos a dialogar tu problema. Y luego, si llegamos con el financiamiento apropiado, vamos a resolver tu dilema.

El otro hombre en cubierta era un representante de la escuela del PENSAMIENTO POSITIVO. �l le grita al hombre: "Amigo, esta situaci�n no es tan mala como piensas. Piensa en seco!" El otro hombre a bordo era un DESPIERTAMENTALISTA. Ya en este momento el hombre se estaba yendo abajo por la tercera vez y desesperadamente empieza a mover su brazo. Al ver esto, el resucitador le grita: Si hermano, veo esa mano, �hay alguna otra?, �Hay alguna otra? Y finalmente, el �ltimo hombre en la cubierta era un REALISTA. �l inmediatamente se lanza al agua, arriesgando su propia vida, y trae al hombre a salvo.
Ilustraciones para el serm�n, 1999.

 

Relaciones de Evangelismo

Hay una historia antigua acerca de un hombre llamado Ali Facid. �l ten�a una peque�a granja y a su familia. Un d�a, la historia dice, que un monje budista viene a Ali Facid y le dice: Sabes, hay una piedras muy valiosas llamadas diamantes, y si t� obtienes una de �stas, puedes llegar a ser un hombre muy rico." Ali Facid se acuesta esa noche, pero las palabras del viejo monje lo capturaron. �l estaba tan obsesionado que sinti� que ten�a que encontrar una de estas piedras para que �l pudiera llegar a ser un gobernante. Vendi� su granja, dejo a su familia con sus vecinos y se va a buscar esas hect�reas llenas de diamantes. Pasan los meses. Estaba quebrado en cuerpo y esp�ritu. Sus ahorros ya se los hab�a gastado. Y en la bah�a de Barcelona, se avienta hacia el agua, para ya nunca caminar sobre la tierra.

Mientras tanto, el hombre que le compr� la granja se agach� un d�a y recogi� una peque�a piedra. La dej� en la mesa no sabiendo lo que era. Unos d�as despu�s el viejo monje budista lleg� y vio la piedra y dijo: Ali Facid ha de haber vuelto de su b�squeda. No, fue la respuesta, Entonces �de d�nde viene este diamante? El granjero le responde: Estaba arreglando el jard�n y la encontr� all�. Amigos, sab�an que en ese mismo jard�n, recuerden que esta no es una leyenda sino una historia verdadera, estaban las joyas y los diamantes que hoy adornan las coronas de Europa y Rusia. En el propio patio de Ali Facid hab�a hect�reas de diamantes y �l no lo sab�a.

Mis amigos, yo s� que (el vecindario de tu iglesia) no es como (menciona dos vecindarios en tu �rea que tengan gran crecimiento econ�mico) en t�rminos de gran crecimiento. Pero amigos, tambi�n s� que hay grandes hect�reas de diamantes en tu propio patio. Hay mucha gente aqu� en nuestra �rea que no tienen familiares en la iglesia, que no est�n comprometidos con Cristo, y que est�n esperando a ser llamados. No tenemos que mirar a otras �reas de la ciudad. Todo lo que tenemos que hacer es recoger los diamantes que est�n junto a nosotros.

 

Evangelismo

Un ejecutivo empleador, un "caza talentos" que sale a contratar a otros ejecutivos para otras firmas, una vez me dijo, "Cuando tengo a un ejecutivo que estoy tratando de reclutarlo para otra persona, me gusta desarmarlo. Le ofrezco un refresco, me quito el saco, luego mi chaleco, me quito la corbata, me descalzo y le hablo de b�isbol, f�tbol, familia, lo que sea, hasta que �l se sienta relajado. Luego, cuando siento que ya est� relajado, me inclino, lo veo directo a los ojos y le digo: "�Cu�l es tu prop�sito en la vida?" Es sorprendente c�mo los ejecutivos se deshacen con esta pregunta.

"Bueno, estaba entrevistando a este cuate el otro d�a, lo ten�a ya desarmado, con mis pies sobre el escritorio, hablando de f�tbol. Luego me enderezo y le digo, "�Cu�l es tu prop�sito en la vida, Bob? Y �l me dijo, sin pesta�ear los ojos, "Ir al cielo y llevarme a toda la gente que sea posible conmigo." Por la primera vez en mi carrera me quede sin habla."

Josh McDowell

 

La meta ignorada de la iglesia: evangelismo

"Evangelismo" es una palabra bella que ha perdido su efectividad. De alguna forma en su viaje del Jerusal�n del pasado al Jeric� de ahora, ha ca�do entre los ladrones que la han herido, deshecho, roto, dej�ndola media muerta. M�s bien le tom� a un samaritano irritado, el preocuparse y pararse a un lado para poner a este pobre hombre sobre su burro, lo lleva a una posada y lo cuida ah�. Esto es verdadero porque una procesi�n de Sacerdotes y Levitas pasaron por un lado, y no solamente se rehusaron a darle la mano, pero temieron, murmurando silenciosamente a la s�plica de este pobre amigo, y esperando secretamente que pronto ver�an lo �ltimo de este hombre.

Clovis G. Capel, "Sermones Evangel�sticos De Clovis G. Capel", Abingdon 1973, p. 40.

 

NOSOTROS: LIBROS ABIERTOS

Una mujer china que acababa de aprender a leer, or� diciendo "Se�or, vamos a trabajar entre muchas personas que no saben leer, Se�or, haz que nuestras vidas sean Biblias abiertas, para que aquellos que no pueden leer el Libro, puedan leerlo en nosotras".

 

EL PODER DE UN CENTAVO

Se dice que una se�ora se encontraba preparando un paquete que iba a enviar para la India. En ese momento se present� un ni�ito de la familia, el cual ten�a un centavo que quer�a obsequiar al pueblo de ese pa�s. Con el centavo compr� un folleto evang�lico y lo puso en el interior del paquete. Este folleto lleg� a manos de uno de los jefes de Birmania, que por medio de su lectura se convirti� al evangelio. M�s tarde ese jefe, despu�s de haber experimentado lo que la religi�n de Jes�s hace en el coraz�n del hombre, cont� esto a sus amigos: con el resultado de que varios de ellos se convirtieron tambi�n. M�s tarde se organiz� una iglesia, la cual pidi� que un misionero fuera enviado, y quince mil convertidos fueron el fruto de la peque�a semilla.

 

LA "ARMADA INVENCIBLE" VENCIDA

Felipe II (1527-1598) era rey de Espa�a y de Portugal, y puede decirse que tambi�n lleg� a ser dictador y due�o de Mil�n, de una parte de Francia, de los Pa�ses bajos, de todo M�xico y Per�; y dec�a que en sus dominios no se pon�a el sol. "Utiliz� a la Inquisici�n como instrumento de gobierno para evitar la extensi�n de la herej�a en sus estados, y lo logr� en Espa�a." (Dic. Enc. Abrev. Espasa-Calpe). Quer�a exterminar el protestantismo en Europa; pero se dio cuenta de que esto le costar�a mucho dinero, y despreciando los procedimientos legales permiti� a ese rey que atacara a Inglaterra y se apoderara de ella si pod�a, a fin de evitar el extendimiento del protestantismo por las tierras que Inglaterra estaba colonizando en la Am�rica del Norte. Entonces dicho rey hizo construir la Armada Invencible, la que puso bajo el mando del Duque de Medina, y se lanz� al ataque�. Pero la marina inglesa, que en ese tiempo era menos numerosa que la espa�ola, y estaba capitaneada por Howard Drake, se defendi� con valent�a y, ayudada por una tempestad que seguramente Dios envi�, destroz� a la jactanciosa Armada Invencible a fines de agosto de 1588. As� pues, de manera providencial no fue detenido el progreso del evangelio en Europa ni su marcha a las Am�ricas

 

EL EVANGELIO PERSONAL

El doctor Rub�n Torrey enumera estas ventajas del trabajo personal:

  1. Todos lo pueden hacer.

  2. Se puede hacer en todas partes.

  3. Se puede hacer en cualquier tiempo.

  4. Alcanza a todas las clases sociales.

  5. Da en el blanco.

  6. Produce grandes resultados.

 

SALVAJES QUE PIDIERON UNA RELIGI�N FUERTE

En la parte nordeste de Borneo hay una tribu de salvajes que han tenido la costumbre de conservar disecadas las cabezas de los enemigos sacrificados. Antes de la Segunda Guerra Mundial estos salvajes no hab�an tenido contacto con el cristianismo; pero despu�s de esa guerra unos jefes de la tribu Dyak invitaron a algunos misioneros metodistas a que trabajaran en un territorio cercano. Hab�an observado la vida de algunos soldados cristianos y quisieron que los misioneros les ense�aran acerca de "Jes�s Dios" y de la "religi�n fuerte", puesto que las creencias paganas de ellos no pod�an cambiar su vida. A partir de la Navidad de 1949, los metodistas bautizaron a 2,500 de estos salvajes en tres a�os, inclusive algunos jefes. Para 1957 los metodistas ten�an sesenta iglesias, 6,000 miembros y 23 ministros en esa regi�n, y unas 11,000 personas m�s estaban prepar�ndose para ser miembros de las iglesias.

 

LA ISLA DE LA CURACI�N FELIZ

Esta es una peque�a isla que est� cerca de Hong Kong, la cual ha sido rentada por el gobierno a una misi�n de Londres, isla donde viven actualmente trescientos leprosos que antes no ten�an hogar y que eran despreciados refugiados en Hong Kong, ciudad que est� bajo el gobierno brit�nico. Entre los centenares de refugiados chinos que se amontonaron en Hong Kong como resultado de la ocupaci�n comunista del territorio chino, hubo grandes cantidades de v�ctimas de la lepra, quienes estaban muriendo de hambre y casi desnudas. Las condiciones eran tan tremendas que la Misi�n de Londres para los leprosos se propuso hacer algo para ayudarlos. Despu�s de que el gobierno les rent� la isla de Nun, cambiaron a los pacientes y comenzaron a construir un edificio en el lugar donde estaban las ruinas de una villa.

Recibieron ayuda de muchas partes, incluyendo a los soldados brit�nicos. Los leprosos que viven all� ahora tienen vidas �tiles y est�n contentos. Se nos dice que en todas partes, en esta comunidad cristiana se ve manifiesto el esp�ritu del Salvador. Bajo la direcci�n piadosa del capell�n James Hu, las actividades religiosas forman la parte m�s importante de la vida de la villa. Por acuerdo un�nime de los que viven en la isla, le cambiaron el nombre de Isla de Nun a "Isla de Hay Ling Chan" que significa "Isla de la Curaci�n Feliz".

 

�POR QU� NO VINISTE ANTES?

En las memorias de Hudson Taylor, primer misionero que fue a China, se cuenta el incidente que sigue: Al fin de un culto de predicaci�n del evangelio, se levant� un chino principal y puesto de pie dijo con voz triste:

"Durante a�os y m�s a�os he buscado la verdad, como toda su larga vida mi pobre padre la busc� sin descanso. He viajado mucho, mucho, y he le�do todos los libros de Confucio, de Buda, de Taos, y no he logrado hallar descanso. Y hoy, por lo que acabo de o�r, siento que, al fin, mi esp�ritu puede descansar. Desde esta noche yo soy un seguidor de Cristo."

Despu�s, dirigi�ndose al misionero, con voz solemne le pregunt� lo que por a�os conmovi� y seguir� conmovido a los que de veras aman a los pecadores perdidos.

--�Por cu�nto tiempo conoc�is las Buenas Nuevas en Inglaterra?.

--Por centenares de a�os �contesta Taylor.

--�C�mo!� �Es posible? �exclam� el chino--, �por qu� centenares de a�os?� �Es posible que hayas conocido a Jes�s el Salvador por tanto tiempo y hasta ahora no nos lo hay�is hecho conocer a nosotros? Mi pobre padre busc� la Verdad por muchos a�os� y muri� sin hallarla �Oh! �Por qu� no vinisteis m�s pronto, por qu� no vinisteis antes?.

He aqu� el grito de todos los que ignoran "las buenas nuevas de salud".

�Cu�n triste es confesar que las tres cuartas partes de los creyentes en Cristo, salvos por su gracia, est�n callados y no dicen a los dem�s lo que otros les anuncian a ellos mismos: Que en Cristo hay salvaci�n eterna ahora mismo!.