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Lista de Ilustraciones sobre la Iglesia:
No TE
subas a los autom�viles: Ellos son causa del 20% de los accidentes
fatales. No TE
quedes en casa: No TE
vayas caminando por las calles o banquetas: 14% de todos los accidentes suceden
a los peatones. No TE
vayas de viaje en avi�n, en tren o por mar: 16% de todos los accidentes
suceden de esta manera. PERO,
SI VE A LA IGLESIA Solo
.001% de todas las muertes ocurren durante un servicio de adoraci�n en la
Iglesia, y estos est�n relacionados a des�rdenes f�sicos previos. Fuera de ah�...
el lugar m�s seguro para estar la mayor parte del tiempo es en la Iglesia. Un lugar que es a�n mucho m�s SEGURO es un estudio b�blico, el porcentaje es todav�a menor! VE A LA IGLESIA! PODRIA SALVAR TU VIDA!
En primer lugar; �No vengas!. Si vienes, �Ven tarde! Al venir, �ven de mal humor! Al salir de la iglesia, preg�ntate: �Qu� val�a todo esto? �No aceptes nunca un cargo en la iglesia! Vale m�s seguir criticando a los dem�s. �Visita a las otras iglesias a cada rato para ense�arle al pastor que �l no es quien te manda! Hay que guardar la independencia. �Haz que el pastor gane su dinero! �Deja que �l haga todo el trabajo!. Al acudir al templo, si�ntate muy atr�s, cerca de la puerta. �No cantes! O si cantas, �Canta bien destemplado!. �No des tus contribuciones por adelantado! �Espera por lo menos hasta haber recibido lo que tu dinero vale! �No animes al pastor! Si te gusta el serm�n, �c�llate! Pues muchos pastores se perjudican por causa de la adulaci�n. �No permitas que la sangre de �l est� sobre tus manos!. �Cuenta las faltas de tu pastor a todos los que te visiten! �Qui�n sabe si de otra manera ellos lo descubrir�n? �No traigas nunca a nadie contigo a la iglesia! No hagas nada para ganar a otros miembros nuevos; por lo menos mientras la congregaci�n tenga tal pastor!. Si hay algunos miembros animados que sirven a su iglesia y que trabajan por ella, �No dejes de protestar contra esa asociaci�n exclusiva!. Si tu iglesia por mala fortuna es una iglesia feliz y armoniosa, cond�nala por su tibieza, indiferencia y falta de celo. Cooperando como se sugiere arriba, t� matar�s por seguro a tu iglesia.
Hizo que algunos dudaran de que el cristiano sea real. Hizo que otros pensaran que yo soy un hip�crita. Hizo que muchos consideraran mi bienestar espiritual y el de los dem�s como asunto sin importancia. Hizo que se debilitara la eficacia del culto en la iglesia. Hizo que el predicador encontrara m�s dif�cil presentar el mensaje. Hizo que los hermanos se desalentaran y, por ende, no alcanzaran una bendici�n de Dios. Hizo que muchos dejaran de asistir a la iglesia. Hizo que me fuera m�s dif�cil enfrentarme a las tentaciones del maligno. Hizo que el diablo tuviera m�s poder sobre las almas perdidas. Hizo que se propagara m�s el h�bito de no asistir a la iglesia.
Se dice que un pastor so�� una noche que �l tiraba, en lugar del caballo, de un gran carret�n cubierto con toldo. El trabajo era muy dif�cil y avanzaba lentamente, sobre todo cuando lleg� a una parte barrosa del camino. Por fin s�lo pudo hacer que el carret�n avanzara unos pocos cent�metros. Esto le parec�a bastante raro, cre�a haber visto a toda la congregaci�n que ayudaba a empujar. Finalmente, cuando �l estaba casi agotado, mir� hacia atr�s para examinar las causas de la dificultad. Ah� se dio cuenta de que los miembros de la iglesia, no s�lo hab�an dejado de empujar sino que se hab�an subido al carret�n, y ah� estaban sentados, ocupados en criticar al pastor porque no tiraba del carret�n con mayor rapidez. Bueno � �y es solamente un sue�o?
Se relata la historia de un pintor a quien se le pidi� que hiciera un cuadro que representara una iglesia agonizante. Entonces �l en lugar de pintar en el lienzo unas ruinas deste�idas, dibuj� un edificio moderno, con todo el esplendor de su grandeza. Las puertas estaban abiertas de par en par y en el fondo se pod�a ver un p�lpito hermoso y ricamente labrado, el magn�fico �rgano, y las hermosas persianas de colores por las que entraban rayos de bella palidez, produciendo una condici�n propicia para el recogimiento. A la entrada de una de las puertas, que estaba sostenida por unos pilares de arquitectura g�tica, estaba colocada una caja adornada con relucientes joyas, para las ofrendas de los arist�cratas que all� asist�an. Sobre la caja hab�a un letrero que dec�a: "Ofrendas para Misiones Extrajeras"; pero en la abertura por donde hab�an de entrar las monedas se ve�a una telara�a que cubr�a no s�lo la abertura, sino casi toda la caja y parte del letrero. Los miembros de alguna iglesia que dejan criar telara�as en las cajas que se destinan para ofrendas de misiones, jam�s experimentar�n toda la riqueza y sensaci�n de dulzura espiritual.
Un d�a Roberto Burns, el poeta nacional escoc�s, de paso por una ciudad extranjera, sinti�ndose solo, busc� la compa��a de sus hermanos en la fe y entr� en un templo. Pero sigui� sinti�ndose solo, ya que nadie le demostraba simpat�a alguna. Antes de partir, escribi�, en la primera p�gina en blanco de un himnario, el siguiente cuarteto: Un viento helado sopla en este templo. Una simpat�a m�s fr�a me hel�. Un pastor de hielo su palabra ha dado �Ni aunque todo hirviese, volver�a yo!
He aqu� un resumen de las leyes de Cristo sobre este asunto, que requieren un conocimiento pr�ctico:
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