Un travieso e impertinente mosquito, tuvo cierto d�a la
ocurrencia de molestar a un le�n que se hallaba descansando tranquilamente. Se
aproxim� a la fiera y con toda insolencia, le dijo:
-�No te tengo miedo! �T� no eres m�s poderoso que yo! �Y si crees lo
contrario, demu�strame lo que puedes hacer! �Rasgu�os con tus u�as? �Clavar
tus colmillos? �Bah!... eso puede hacerlo hasta el m�s d�bil de los gatitos!
El le�n, indiferente, no hacia el menor caso a las palabras del mosquito, pero
�ste sigui� insistiendo:
-�Soy m�s fuerte y valiente que t� y te lo demostrar�!, �Te desafi� a
luchar!
Y sin m�s, el mosquito empez� a revolotear alrededor del le�n, se lanz�
sobre �l y clav� su aguij�n en la nariz del felino. Desesperado, el pobre le�n
comenz� a rascarse, dio zarpazos en el aire rugiendo de dolor, hasta que se
sinti� rendido y desisti� de seguir luchando.
El mosquito, victorioso y satisfecho, hizo sonar su trompeta zumbadora y
emprendi� el vuelo entonando una canci�n triunfal. Iba tan cegado de orgullo,
que no advirti� que una tela de ara�a se interpon�a en su vuelo y qued�
atrapado en ella. Apesadumbrado y lloroso, el mosquito se lament�...
-�Le hago la guerra al animal m�s fuerte, le venzo... y ahora sucumbo a causa
del m�s insignificante insecto!
Este es el precio que tuvo que pagar el intr�pido mosquito por prepotente y
fanfarr�n.
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